El legado de las Luces esta en crisis. Su confianza ciega en la razon y la tecnologia resulta ingenua frente a la emergencia ecologica que vivimos. Ante esta situacion, no son pocos los intelectuales que han optado por buscar alternativas a la Ilustracion, transitando a menudo los peligrosos senderos del antirracionalismo o el autoritarismo. Sin embargo, debemos desechar la Ilustracion en su totalidad? Es acaso un proyecto estanco, inamovible, caduco? Se puede actualizar, mas de doscientos anos despues, un pensamiento cuyo objetivo era la autonomia del ser humano? Corine Pelluchon aborda lucidamente estos interrogantes para relanzar, en un contexto de colapso eco-social, los presupuestos criticos y emancipadores del movimiento ilustrado original, pero purgando el antropocentrismo y ajustandolo a los limites biofisicos que impone nuestro planeta. Una razon absoluta, que ha devenido racionalidad instrumental, da paso asi a la humildad de un pensamiento que se sabe eco-dependiente. Este es, segun la apuesta de la autora, el unico camino para una democracia respetuosa con la naturaleza.