En nuestro tiempo no es corriente oir hablar de obediencia, pobreza y castidad y, sin embargo, son algo decisivo para la vida cristiana en cuanto tal, pues los "consejos evangelicos" indican la forma en la que la libertad del creyente se compromete en el seguimiento de Cristo. Para vivir plenamente su vocacion y mision, un cristiano no necesita mas que renovar cada dia el encuentro con Cristo, reconocer su presencia en la Iglesia y en todas las circunstancias, adhiriendose a esa "dulce presencia" con toda su humanidad. El presente volumen, cuyo origen son unos ejercicios espirituales dirigidos a sacerdotes, se ofrece como un instrumento vlido de reflexin para todo cristiano -cualquiera que sea su estado de vida- sobre los consejos evanglicos, permitindole profundizar en la amistad con Cristo que, a travs de los miembros de su Iglesia, se dilata en el mundo.